martes, 6 de abril de 2010

DAV 3CAMPOS TRILNICK

Proyecto: “ESTATUAS EN EL TIEMPO”

MIGUEL PELLEGRINI

IDEA

Elaboración de una pieza sonora conceptual compuesta por composición musical, sonidos y diálogos. Registro en imágenes de la misma pieza. Puesta en escena: una pista de audio disparada en sincronización con músicos tocando en vivo y con las imágenes previamente filmadas y editadas y representación actoral con dos personajes.

SINOPSIS

Serena es una chica de veinte años, pero luego del atentado del 2002, el cual enrocó el tiempo biológico con el tiempo de las sensaciones, su cuerpo es el de una mujer de sesenta, para recuperar su vida normal debe entrar en la Vorágine del Tiempo y dominar sus sensaciones las cuales se ven materializadas.

PROPUESTA IDEOLÓGICA

Los distintos personajes que sufren de la aberración del tiempo biológico son reacios a aventurarse en la Vorágine del Tiempo ya que, en ella, se materializan sus más profundas sensaciones, a veces inconscientes, imposibilitando el control de las mismas. La psiquis humana es el motor de la conducta, y muchas veces el conflicto se da cuando el fuero íntimo del humano impone cierta sensación o deseo, y el fuero exterior se reúsa a concretarlo o simplemente interfiere. Es lógico pensar que si uno pudiera elegir no sentir nostalgia (fuero interno), no terminaría llamando a una ex novia (fuero exterior o social). Si el conflicto no se resuelve en el fuero exterior o social, se precipita en el cuerpo, en el ámbito biológico: el llanto.

El desafío de los personajes es convivir, aceptar y hasta superar las emociones más ocultas dentro de la psiquis, pero todos tienen miedo, miedo de su propia mente.

Es el terror del humano, sublimar eso que quita el sueño, que hace llorar. La focalización de la psiquis tiene predilección por el auto boicot, ahí es donde reside la fortaleza de la protagonista, tiene aptitudes para controlar su tifón mental y focalizarse en lo que realmente desea.

Sintiendo la calma más real se pueden controlar las emociones, el tiempo (en esta ficción). Sólo logrando la objetividad absoluta sobre sus vivencias, no deseando el pasado o el futuro, no sufriendo el presente, no viviendo de un recuerdo, no especulando, no maquinando, no negando, no reprimiendo, sólo así, en ese estado de calma y aceptación se puede volver al tiempo conocido y propio.

PROTAGONISTAS Y CUERPO

Los protagonistas son Serena e Indio. Ambos rescatados de la Vorágine del Tiempo. Serena tiene una mentalidad de veinte años y un cuerpo de sesenta, Indio tiene una mentalidad de sesenta, pero un cuerpo de veinte. Queda develada una concepción social un tanto aceptada, un tanto negada: La primera atracción es física. La lenta aproximación hacia el conocimiento de la conducta llega luego. La personalidad y el temple tal vez están en el medio del camino, pero la resolución a ciertas situaciones puede ser desconcertante, desaprobada, desalentadora y hasta herir. Sin embargo, el motor que sigue encadenado hasta la muerte entre los dos, es el cuerpo.

La pasión que se esconde en la fantasía de la especulación tiene como fachada el físico, la imagen que impresiona por primera vez. En la primera aproximación siempre hay sexo, siempre hay instinto y aquí me refiero a una postura ideológica personal: ¿cómo tener la certeza de que ese cuerpo que nos llama como una sirena con sus cantos, no va a gritar y a maldecir nuestras convicciones aplastando el Narciso? El arriesgarse a ello es lo “práctico”, lo “interesante”, lo “picante”, así piensa Serena.

Pero ese picor puede dejarnos con un halo de indignación el resto de nuestros días. Así piensa Indio.

LA EMANCIPACIÓN

Por causas tal vez biológicas, tal vez psicológicas, el humano siempre tiende a dominar y a ser dominado. En una historia lineal donde podemos encontrar el acontecimiento que hilvana, la emancipación del grupo dominado, se suceden nuevos modelos de esclavitud, y nuevos modelos de revoluciones.

La mecánica del reino animal, la selección natural, gobierna también al ser humano, pero éste con una diferencia: el trayecto, muy paulatino, hacia una concientización, hacia la noción de que no es necesario dominar al otro para sobrevivir, para acceder a beneficios, a placeres únicos, a la salvación.

El presente dispositivo reaccionario de dominación es claro: la cultura de consumo de masas, el capitalismo, la economía. Pero ya el dispositivo está sufriendo metamorfosis, un paneo hacia la amalgamación con la violencia, el terrorismo, la economía del terror. La dominación mediante la violencia.

Los protagonistas deben emanciparse. No saben de qué, pero saben que son esclavos, saben que su vida y su paradigma están manipulados, no saben cómo tampoco. Están durmiendo sabiendo que están dormidos, o por lo menos eso buscarán. Su vida transcurre con una constante inquisición de la realidad, o lo que ello simbolice bajo sus vastos significados, la dominación siempre fue tangible, pero cada vez se desenfoca más. Tal vez para los esclavos del antiguo imperio egipcio, la esclavitud era invisible también. Para los protagonistas la dominación está escondida, y no es violenta, sino muy silenciosa, tal vez se halla en la misma cueva oscura e inaccesible desde donde domina todo: la mente.

IDEOLOGÍA COMPLETA

Las causas instintivas que llevan a un humano a dominar a otro, provienen del mismo motor que las ganas que llevan a un humano a querer reproducirse con otro, y procrear la especie. La propuesta concreta es la siguiente: concientizarse de que no es necesaria la competencia para que la evolución siga adelante, no es la solución poner la razón al mando de los instintos de autoconservación (superando o eliminando al otro), sino, ponerla al mando de los infinitos potenciales mecanismos de autoconservación prácticos y altruistas.

Desdoblar la necesidad animal y encauzarla, amainarla. Dejar ese fuego inextinguible sólo para la pasión del cuerpo a cuerpo, para la procreación. Tener capacidad de ser irracional en los momentos de pasión y amor, y no en el huracanado campo de batalla social. Sólo con calma y aceptación podemos dominar esas sensaciones y evitar ser presas de nuestra inteligencia emocional.

ACLARACIÓN

El andamiaje de mi ideología es personal y no tengo el menor ímpetu en hacer de ella una verdad impuesta ni definitiva en este momento. Los argumentos para pincharla son infinitos, y es mi trabajo llegar a elaborar una convicción conjunta mediante la dialéctica con mis interlocutores, para coagular cada uno de esos pinchazos.

PUESTA EN ESCENA

La pista de audio previamente grabada y editada será lanzada en sincronización con un metrónomo. Esta señal de parámetro será habilitada para cada uno de los músicos que tocan en vivo. Por otro lado, esa misma señal de audio irá en una misma señal con la imagen que será proyectada. De modo que la imagen, el sonido y la música en vivo irán en perfecta sincronización.

Habrá parlantes destinados únicamente para la salida de señal de sonido y aparte, equipos para los músicos. La ecualización de la música en vivo será minuciosa al extremo, no debe sobresalir, ni encandilar al audio grabado. Trabajaremos con consolas portátiles para tener una mezcla más dinámica.

Las luces se apagarán totalmente para lograr la óptima ejecución de la proyección, sólo se dispondrán luces de baja potencia para los músicos que no llamen la atención del público.

domingo, 4 de abril de 2010

Reel

STATEMENT

A veces es difícil, o hasta imposible, transmitir los tonos y colores de la emoción intrincada, oculta en el mundo de las ideas de cada ser humano. Imposible o difícil desde el uso de la lengua. Pero el gesto, la modulación, el movimiento corporal, etc., son un tamiz de esa arena sensitiva arraigada en nuestro espíritu. El arte, es, por lejos, el vehículo más idóneo para comunicar este mundo no material que nos gobierna.

La cuestión está puesta en cierta forma de “contenido”. La focalización se encuentra, en mi opinión, en qué contar. Lo que va a determinar inexorablemente, una reflexión sobre los heterogéneos pero comunes conflictos humanos que se materializan en una obra de arte.

Uno de los principales tópicos de representación es el que describe Nelly Schnaith: las heridas de la autoestima. El ser humano, a través de la historia, va a hacer arte utilizando como motor sus penas, sus miserias y su dolor. Del amor, de la condición social, del destino trágico; gran parte de la estantería artística universal, tiene como mejores exponentes, obras donde el receptor siente empatía, se emociona, la comunicación es casi perfecta. ¿Por qué? Porque el receptor se siente identificado con ese conflicto, con ese dolor, esa pena y esa miseria de la autoestima.

El conflicto que emana del humano se presenta del incumplimiento de un objetivo, y se asoma a la realidad mediante el fluir de la conducta, dice José Bleger. El objetivo es el meollo del artista, sin objetivo no hay deseo, no hay emoción, no hay creación artística. A su vez, dice Bleger, la conducta es la sumatoria de los conflictos, y es imposible escapar a esa naturaleza instintiva humana.

Es inevitable que todo ser humano tenga una bomba de escape artística, donde ahogará su fuego instintivo, ya sea de tristeza o de alegría. La discusión sobre los límites imprecisos de la definición de arte se escure, desde mi óptica, hasta la tangente donde lo sensible se comunica claramente, y el receptor experimenta el proceso estético. Cada vez que un sujeto se sensibiliza, hay arte, porque puede ser una especie de arte en una forma indeterminada dentro del océano emocional del sujeto, que luego va a devenir y se va a sublimar en alguna forma concreta material.

Apelo, por último, a Marta Zántonyi incorporando un concepto más del proceso artístico: el recorte de la realidad. La subjetivización de lo objetivo. Nuestras representaciones son nuestras y únicas, así como nuestra visión, una obra de arte, por ende, siempre va a tener un fragmento de nuestro espíritu que devendrá en una cosa objetiva para el resto. Estos conceptos me obligan a coronar con una frase de Arthur Schopenhauer: “El mundo es mi representación de él.”